âBeastâ, un vehĂculo estrella de Kollywood (tamil) para Vijay, todavĂa se siente diferente, aunque solo sea por la fuerza con la que sus creadores intentan vender su liderazgo como un hombre renacentista del siglo XXI. Vijay («Maestro») puede bailar un poco, conducir un automĂłvil a travĂ©s de varias superficies de vidrio y tambiĂ©n decapitar a un terrorista y luego arrojar la cabeza sin cuerpo de ese tipo por una ventana alta. Por no hablar de la escena en la que Vijay se pone un juego de patines y literalmente patina en cĂrculos alrededor de un grupo de extremistas con mĂĄscaras.
La autoimagen de Vijay de todo para todos se celebra en todo momento, como en el coro de una canciĂłn que elogia al hĂ©roe de mejillas de ardilla listada como «mĂĄs delgado, mĂĄs malo, mĂĄs fuerte». Un nĂșmero final tambiĂ©n describe a Vijay como un «tigre multifacĂ©tico con un avatar multifacĂ©tico». En este punto de la pelĂcula, Vijay regresa volando de PakistĂĄn en un aviĂłn a reacciĂłn militar prestado, despuĂ©s de haber masacrado de forma independiente un campamento terrorista.
En âBeastâ, Vijay interpreta a Veera, una exmiembro de la agencia de inteligencia Indiaâs Research and Analysis Wing (RAW) con recursos sobrehumanos. Veera se retirĂł de RAW once años antes del presente de la pelĂcula: en un flashback introductorio, Veera hace estallar involuntariamente a una niña con un lanzacohetes. Mira, no hay manera de hacer que esta trama suene menos loca de lo que es, asĂ que hagamos una pausa en el pĂĄrrafo.
Bien, Veera ahora es muy sensible con los niños, lo que explica por quĂ© solo vuelve a la acciĂłn despuĂ©s de que Ă©l, que ahora trabaja para una empresa de seguridad en quiebra, escucha los gritos de los niños angustiados despuĂ©s de que los terroristas de la ISS al estilo ISIS toman el East Coast Mall de Chennai. . Estos terroristas son despiadados, como podemos ver por la forma en que uno de ellos le da un revĂ©s a una dama y traumatiza a una niña que llora. (entre otras cosas) los terroristas de la ISS estĂĄn dirigidos por Saif (Ankur Ajit Vikal), quien pasa la mayor parte de la pelĂcula usando una mĂĄscara de lĂĄtex que se parece extrañamente a Anton LaVey, y su traidor logro, el Ministro del Interior anĂłnimo del gobierno indio (Shaji Chen), como vemos en una escena temprana.
La naturaleza caricaturescamente despiadada de los muchachos de Saif es un hecho. O tal vez simplemente no se enfatiza con tanta frecuencia como las contramedidas igualmente brutales de Veera. Tampoco hay nada de disculpa o conflicto sobre la violencia en la pelĂcula, que efectivamente se juega por diversiĂłn en un puñado de escenas de acciĂłn intensiva. En una de las primeras escenas, Veera tambiĂ©n corta el brazo de un villano enmascarado por la articulaciĂłn del codo. Y mata a puñaladas a dos terroristas de la ISS frente a una audiencia cautiva de rehenes del centro comercial. Entre asesinatos, Veera se hace el muerto para fingir a su segunda vĂctima. âTodo esto es normalâ, les dice a los rehenes despuĂ©s de apuñalar al segundo tipo en la cabeza. La multitud parece creerle a Veera ya que, en una escena posterior, un civil muy nervioso (el prolĂfico comediante tamil Yogi Babu, por supuesto) es golpeado por los terroristas de la ISS, pero se niega a delatar a Veera.