La pelĂcula tiene un par de impresionantes escenas de caos apocalĂptico generado por computadora (CG) tras el descubrimiento de una grieta potencialmente enorme en el suelo del Mar del Norte. No lo suficiente, pero algo. TambiĂ©n hay algunos momentos tensos de acciĂłn creciente, principalmente relacionados con la sensata experta en submarinos Sofia (Kristine Kujath Thorp) y su viaje para reunirse con su abnegado trabajador de la plataforma petrolera Stian (Henrik Bjelland), quien inevitablemente arriesga su vida para para salvar a muchos otros. Lo principal que impide que «The Burning Sea» sea mĂĄs que un gusto adquirido es tambiĂ©n lo que lo hace satisfactorio como tal: estos personajes realmente nunca van a ninguna parte ni hacen nada inesperado.
âThe Burning Seaâ comienza y termina con una secuencia sujetalibros sermoneadora pero estudiadamente inofensiva que presenta al frĂo representante de la plataforma petrolera William Lie (BjĂžrn Floberg), quien les cuenta a los espectadores, frente a la cĂĄmara, como si fuera el tema de un documental parlante, sobre Noruega. historia complicada con la perforaciĂłn en alta mar. Hay arrepentimiento en la perorata de Lie, a pesar de su rechazo directo a quejarse demasiado amargamente (o especĂficamente) sobre quiĂ©n tiene la culpa.
Al mismo tiempo, Lie es un hombre de la empresa y un gerente de emergencias, por lo que inevitablemente tiene que recordarles a SofĂa y a su compinche compañero de trabajo Arthur (Rolf Kristian Larsen) que ambos firmaron acuerdos de confidencialidad. Significado: legalmente no pueden advertir a nadie sobre el inminente y altamente explosivo desastre que podrĂa estar a punto de estallar en la plataforma petrolera Gullfaks A, ubicada a 220 kilĂłmetros de la costa occidental de Noruega. Lie resulta ser mĂĄs comprensivo de lo que cabrĂa esperar de un personaje en su posiciĂłn, aunque eso se debe en parte a que, como dice desde el principio: tambiĂ©n solĂa trabajar en plataformas petrolĂferas. Ahora es gerente, por lo que las simpatĂas de Lie ahora son mĂĄs esquivas.
La inesperada humanidad de Lie dice mucho sobre «The Burning Sea», una pelĂcula que dedica mĂĄs tiempo a fortalecer la relaciĂłn entre SofĂa y Stian que a impulsar la evacuaciĂłn y probable destrucciĂłn de Gullfaks A. TambiĂ©n se demuestra que SofĂa es una experta en operar a control remoto. participa en algunas escenas de establecimiento, pero su relaciĂłn con Stian y su hijo Odin (Nils Elias Olsen) a menudo eclipsa su identidad como cientĂfico ingenioso. Eso no es tan malo en sĂ mismo, pero uno desearĂa que tuviera que hacer mĂĄs actos heroicos al estilo de James Cameron en lugar de un PDA lindo, pero corriente, con Stian. A diferencia de la mayorĂa de las parejas de pelĂculas de desastres, Bjellan y Thorp tienen una quĂmica tangible en la pantalla, pero eso no significa que un primer plano extremo de la pareja que se besa con esquimales no sea demasiado.