Escrita y dirigida por Duane Adler, quien escribió el guión del “Step Up” original, “Make Your Move” tiene una trama bastante complicada, que involucra patrocinio corporativo, planificación de eventos, cambios de carrera para bailarines, visas e inmigración, sin mencionar varios dramas familiares y romance en ciernes. Es mucho para absorber. Pero una película como «Make Your Move» se basa en el éxito de sus diversas secuencias de baile, no en su trama. Y el baile aquí es emocionante, innovador y específico. Cada «número» tiene una historia detrás, una motivación, apariencia y sensación diferentes. Adler y su director de fotografía Gregory Middleton eligieron filmar gran parte del metraje usando tomas de cuerpo completo, la cámara moviéndose con los bailarines, dándonos la oportunidad de ver a los bailarines en acción, moviéndose por el espacio. Muchas veces con las películas de baile, el trabajo de cámara y las opciones de edición cortan de todo el cuerpo, mostrándonos diferentes partes y gestos, tratando de generar una sensación de emoción y movimiento a través del montaje. Puede ser frustrante, especialmente si creciste viendo a Fred Astaire y Ginger Rogers: «¡Déjame ver al bailarín completo!» «Make Your Move» nos muestra al bailarín completo. Estas secuencias realmente se mueven de una manera que se siente orgánica.
Donny casi instantáneamente se enamora de Aya (interpretada por la cantante de pop surcoreana BoA), la hermana menor de Kaz. Aya baila con un grupo de chicas llamado Cobu Girls, y su coreografía es una combinación de tambores Taiko japoneses y claqué de Broadway. Aya está atrapada en medio de la guerra entre su hermano mayor y Nick, y sus problemas se ven agravados por el hecho de que será enviada de regreso a Japón en tres semanas si no consigue algún tipo de concierto, y pronto. Ella y Donny se encuentran una noche en Static y terminan teniendo un baile de claqué improvisado arriba en el bar. Este baile es donde realmente comienza la película. Ambos bailarines no solo son excelentes atletas, sino que están apegados al momento subyacente al baile. Es un coqueteo, es un baile de apareamiento, es una competencia, los dos se empujan para lograr mejores movimientos. Te haces una idea real de lo divertido que se vuelven a bailar juntos. Es contagioso.
A pesar de la creciente violencia entre los dos clubes, Aya y Donny forman un dulce y tímido romance. Nick y Kaz intentan intervenir, y a veces es bastante Montague / Capuleto. El futuro de Aya es tan incierto que no está segura de querer involucrarse, y Donny acepta ese ‘no’ como respuesta, pero pregunta si podrían bailar juntos de nuevo al menos. La película comprende lo que significa la danza para quienes la experimentan y respiran. Hay una verdadera sensación de placer y emoción cuando encuentras a tu “pareja”, alguien que te empuja a ser mejor, que puede leer tus movimientos con anticipación, que puede moverse contigo. Podría haber vivido sin la escena coreografiada (literalmente) de los juegos previos, mientras bailan hacia la cama, pero hay otras secuencias de baile en el medio donde su química vibra fuera de la pantalla.