Que de Series Peliculas Reseña y resumen de la película Santa Sangre (1990)

Reseña y resumen de la película Santa Sangre (1990)

La historia involucra a Fenix, el niño mago del Circus Gringo, un espectáculo de gira en México. Interpretado por dos de los hijos de Jodorowsky (Adán alrededor de los 8 años, Axel alrededor de los 20), Fenix ​​es el hijo de la hermosa trapecista Concha (Blanca Guerra) y el inflado dueño del circo y lanzador de cuchillos Orgo (Guy Stockwell). También junto a Fenix ​​está el enano Aladdin (Jesús Juárez), quien le sirve como su asistente y apoyo moral.

La mejor amiga del pequeño mago es Alma (Faviola Elenka Tapia y, mayor, Sabrina Dennison). Ella es un mimo mudo, la hija de la mujer tatuada carnal (Thelma Tixou), que sirve como objetivo para los cuchillos de Orgo.

Una noche, mientras Concha está suspendida sobre el circo por su cabello, ve a Orgo acariciando a la chica tatuada y grita para que la devuelvan a la tierra. Enojada, los atrapa en la cama y arroja ácido en los genitales de Orgo. Respirando de dolor, le corta los brazos con poderosos golpes de dos cuchillos. Luego se suicida, el ácido lo ha vuelto poco interesante para las mujeres tatuadas y otras personas.

La mutilación de Concha es una cruel ironía: es la líder de un culto de mujeres que adoran a un santo cuyos brazos han sido cortados por violadores. Su iglesia contiene un charco de sangre, sin duda sugiriendo fluido menstrual (el nombre de Concha es la jerga mexicana para la vagina); sus miembros visten túnicas con los brazos cruzados y cortados. Cuando llegan las autoridades para demoler la iglesia, hay un enfrentamiento entre las mujeres y la policía, luego un partido de gritos entre Concha y el monseñor local, ella grita que el charco contiene sangre santa, él responde que es pintura roja.

La excavadora revela la construcción en mal estado de la iglesia, principalmente de hierro corrugado y tal vez refleje el presupuesto limitado de la película. Sin embargo, si los fondos de Jodorowsky eran limitados, sus imágenes e imaginación son ilimitadas, y esta película rebosa de energía erótica y maligna. Considere la escena en la que el elefante del circo muere después de sangrar de su trompa. En un funeral que es a la vez triste y divertido, el gran ataúd de la bestia es arrastrado por un barranco y volcado por el borde, para el deleite de los pobres barrios marginales, que rompen el ataúd y arrojan carne en él. la multitud. Una imagen como esta es una de las razones por las que vamos al cine: es lógica, ilógica, absurda, patética y sublimemente original. Para Alejandro Jodorowsky, todo esto en una jornada de trabajo.

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