A esta descripción básica de la trama, solo se debe agregar una cosa: es bueno ver el amor en las películas como el amor en las películas para variar. “Yo, Natalie” es tan convencional y cursi como calentado “Young at Heart” (los cuentos de hadas pueden hacerse realidad, te puede pasar a ti).
La historia involucra a Patty Duke, conocida como la cara de payaso en el vecindario, a quien su madre le ha prometido que pase lo que pase, cuando sea mayor, será hermosa. Pero, ay, cuando crezca, todavía es simple y tonta y debería haber tenido aparatos ortopédicos en los dientes.
Se anima con su amado tío Harold, quien explica que los niños buscan la belleza exterior, pero los hombres, ¡hombres! – Mira más profundamente en el alma de una mujer. Pero luego el tío Harold se compromete con la bailarina go-go con el busto de 40 pulgadas. Los padres de Natalie establecieron citas con unos desagradables primos segundos, pero no tenía sentido, y finalmente ella se escapó al Village para ser ella misma: yo, Natalie.
La película es desigual. Hay tres interludios líricos semi-obligatorios en los que uno lo hubiera hecho (un S-OLI, recordarás, es cuando alguien comienza a cantar en la banda sonora y la heroína atraviesa la lluvia. O neblina, o surf, o algo así, en cámara lenta para mostrar lo bella o trágica que es la vida. Cada película en estos días tiene al menos un interludio lírico semi-obligatorio, han sido la novedad durante ocho años).
Los interludios son un error porque distraen la atención de la historia; si Natalie es algo, no es el tipo de chica que se hunde en la niebla. A veces, desesperado, me pregunto cuándo un director se animará y confiará en su historia en lugar de en sus artilugios. Poco importa. «Yo, Natalie» es una película bonita, a veces muy divertida, y la prueba en la audiencia fue que a las mujeres les gustó mucho. Y Patty Duke, como Natalie, ofrece una actuación maravillosa.
Nota: ¿Por qué todos los artistas de las películas son malos artistas? Las pinturas que exhibe James Farentino en esta son desnudos pastel hechos al estilo de las envolturas de tela del norte.